Barry Ashworth, líder de los Dub Pistols, está del otro lado de la línea para hablar del nuevo trabajo de su banda, The return of the Pistoleros. Al igual que en sus discos anteriores, este regreso es una mezcla estimulante de ritmos electrónicos y jamaiquinos, como si en una licuadora pudieran mezclarse el dub, el reggae y el dancehall con el drum and bass y la euforia del big beat.
El resultado de ese licuado batido a gran velocidad sería Dub Pistols, la agrupación con la que Ashworth lleva casi dos décadas en actividad y que lo ha llevado a presentarse en todas partes del mundo.
Si el título del nuevo álbum habla de “regreso” tal vez sugiere que en algún lugar se habían replegado, pero el productor dice que no, que son los mismos de siempre. “No nos habíamos ido a ningún lado”, ríe Ashworth cuando escucha la pregunta. “Es un disco más y eso significa que es un comienzo nuevo, pero no es que estuviéramos escondidos”.
–¿Pero ustedes se consideran “pistoleros”?
–Bueno, somos los Dub Pistols, así que jugamos un poco con eso. Para serte honesto, la inspiración vino de Luis Suárez. Soy un gran fanático del Liverpool, y él fue nuestro goleador, así que es el verdadero pistolero. Es un jugador enorme.
–También es muy bueno con las mordidas.
–Sí, haciendo trampa también es bueno (risas). Más allá de eso, es una pena que se haya ido (ahora juega en Barcelona), porque es un futbolista genial.
–¿Alguna vez sentiste que Dub Pistols había llegado a la masividad o tal vez están más cómodo en una escena alternativa?
–Nunca fuimos mainstream. Nunca quisimos hacer canciones pop o seguir las tendencias. Siempre tuvimos una ética rockera o punk, más allá de que cambie el sonido. Somos demasiado fiesteros para estar en el mainstream.
–Pero ahora la electrónica es lo masivo, con los artistas de la EDM ¿Qué pensás de eso?
–En Estados Unidos la llaman así. Si decís EDM en Inglaterra probablemente no entiendan a qué hacés referencia. Es la peor denominación que he escuchado… La música electrónica para bailar, como el house de Chicago o el techno de Detroit, era de Estados Unidos y después venía a Inglaterra. Ahora con la EDM pareciera que los estadounidenses acabaran de descubrir la electrónica... ¡Y la mayoría de los pioneros son de ahí! Hay gente estúpida en todos lados.
–¿Viviste la escena acid house de mediados de los ‘80 en Inglaterra? El llamado “Segundo verano del amor”.
–Claro. Estoy viviendo allí desde entonces.
–Digamos que conocés la historia de primera mano.
–En 1987 fui por primera vez a un club electrónico y eso cambió mi vida. Lo viví, tomé las cosas equivocadas, pero me sirvió para hacer lo que me gusta. Me puse a trabajar en clubes nocturnos y en la escena electrónica de Inglaterra.
–En la década de 1970, la escena jamaiquina de Londres estaba en Brixton. ¿Cómo es ahora? ¿Sigue ahí?
–En Brixton y también Nothing Hill, al oeste de Londres. Allí hay una gran comunidad caribeña, donde estaban todos los clubes underground. Ahora es todo mucho más masivo, la escena reggae londinense es muy grande. Además, se formaron muchas familias, tuvieron descendientes, y ellos hicieron su propia lectura de esa música. Ocurrió con muchos géneros, como el dubstep, dancehall, hip hop... Todos tienen su influencia del reggae.
–Una de las canciones nuevas del disco se titula “Real Gangsters”. ¿Cómo sería un gangster falso? ¿Existen?
–Claro que existen, están en todos lados (risas). Son esos que se hacen pasar por tipos malos. En el hip hop pasa mucho: algunos andan con autos lujosos y grandes cadenas haciéndose los malos, hasta que vuelven a casa con su mamá.
–¿Te sentís cómodo tocando en festivales o clubes? La de Dub Pistols es una música potente, con un sonido muy amplio.
–En los dos lugares nos sentimos bien. Amo los festivales, el hecho de tocar y vagar por un gran predio frente a miles de personas. La gente está dispuesta a pasarla bien. Y nuestra música funciona bien para eso, definitivamente somos una banda de festival. Pero también me gusta tocar en lugares más íntimos, donde hay una vibración más eléctrica.
–Has grabado con Terry Hall de The Specials. ¿Cómo lo conociste?
–The Specials fueron una gran influencia para mí, sin duda es una de mis bandas favoritas. Así que te imaginarás que Terry Hall es uno de mis grandes héroes. El día que lo conocí estaba en mi estudio de grabación casero, alguien tocó la puerta y ahí estaba Terry. Fue increíble. Tiene un sentido del humor bastante seco, pero es un tipo muy gracioso. Nos volvimos grandes amigos, hay que conocerlo para entender su forma de ser.
–¿Hay planes de visitar Argentina?
–Estamos tratando de ir para septiembre u octubre. Una vez toqué como DJ en Creamfields de Buenos Aires. El público es totalmente eufórico en Latinomérica. Fue muy fuerte sentirlo, son como hinchadas de fútbol, con banderas y esas cosas, y la gente saltando. Me dan ganas de ir con la banda, espero que pueda llevarse a cabo.
Barry Ashworth, líder del grupo británico Dub Pistols, habla del nuevo disco y cómo vive la cultura electrónica.